Poesía

Tu voz es la espada que libera el silencio de mi alma.

sábado, 30 de mayo de 2020



El “Malleus Maleficarum” y el derecho penal.

“El concepto de brujería fue creado por teólogos, predicadores e inquisidores de la Iglesia católica,(…) lo que ellos hicieron fue hacer de las prácticas mágicas populares, que eran básicamente una técnica para controlar el mundo (o sea, para curar, dañar, ser exitoso en el amor, etc.), una religión heterodoxa o herética, pues sostuvieron que las brujas establecían un pacto de fidelidad con el diablo y lo adoraban en reuniones nocturnas llamadas “aquelarres” o “sabbats” así como realizando malas obras. El martillo de las brujas. Para golpear a las brujas y sus herejías con poderosa maza, escrito en el siglo XV por los inquisidores dominicos Heinrich Kraemer y James Sprenger. El objetivo explícito de El martillo es el de terminar con la brujería: “se debe hablar al pueblo con el fin de hacer odiar el crimen [de la brujería] y para que los jueces sean más ardientes en la venganza del crimen de los renegados de la fe [i.e. de los brujos]” (II, I, XIV, 314)” (1)

“El Martillo puede ser estudiado de múltiples formas. El lector interesado puede acercársele desde diversas atalayas. El Martillo es un texto construido con un aparato erudito exactamente bajo el signo metodológico e ideológico común a cualquier obra académica de la época. El Malleus Maleficarum está integrado por tres grandes partes, cada una dividida en cuestiones. (…) La Parte Primera trata acerca de los tres elementos que coinciden en el maleficio: el Demonio, la bruja y la permisión divina. Comprende dieciocho cuestiones, que, podría afirmarse, son temas esenciales de una criminología etiológica, es decir, de tipo causal-explicativa, cuyo objetivo fundamental es explicar el origen y las causas del crimen. La Parte Segunda se refiere a la forma en la que las brujas infieren los maleficios, así como las distintas formas de luchar felizmente contra ellos. Comprende dos cuestiones: la primera está integrada por dieciséis capítulos y la segunda por ocho. Hoy diríase que esta parte contiene tópicos fundamentales de criminalística y política criminal o criminológica. La Parte Tercera comprende veinticinco cuestiones relativas a la actuación judicial contra los brujos, las brujas y otras mujeres tanto en el fuero eclesiástico como en el civil. Aquí, se contienen y muestran, de forma muy elocuente, las reglas para iniciar proceso judicial (inquisitorial), así como para obtener la verdad por medio de la confesión —mejor dicho, mediante la tortura— y pronunciar sentencia (condenatoria).
La última parte del Malleus Maleficarum es fundamentalmente de carácter procesal o, mejor dicho, procedimental. Constituye también, junto a otras obras del mismo tenor, un texto de consulta obligada para conocer el modelo inquisitivo de justicia penal.
El Malleus Maleficarum es un libro emblemático por cuanto integra en su contenido saberes criminológicos, criminalísticos y de derecho penal sustantivo, procesal y de ejecución de penas. En este sentido, se trata de un libro fundacional de un modelo integrado de saber penal. De igual forma, el Martillo fija un hito en la tradición jurídica y política de Occidente.” (2)

“(…) según un informe de las Naciones Unidas del 2009 que no habrá cambiado mucho al 2020, ser etiquetada como bruja equivale a una pena de muerte. Durante una crecida de abusos contra la brujería (…) Londres formó un equipo policiaco para reducir la violencia contra las acusadas de brujería; en contraste, los funcionarios en Arabia Saudita crearon una unidad antibrujas que adiestra a los cuerpos policiacos a “luchar científicamente contra la brujería”. (3)


(1) Elia Nathan Bravo. El diablo y las brujas: una religiosidad del miedo.

(2) Octavio R. Acedo Quezada. “Remedievalización del Derecho y la Política. Introducción crítica al estudio del saber jurídico-político.” Instituto de Investigaciones Jurídicas, UNAM, 2019.

Brujas. Nexos. 01 de mayo de 2020.






La misma y otra música, la misma y otra pócima.

Con manos de polvo escribe el tiempo
en los rincones donde aprendí a ser fantasma.

Respiro el tejido infinito
en los bordes de un espejo
quebrado.

Soy quien arrulla la niebla y en susurros te habla
de la alegría de un día,
de este instante de trazos circulares
en la tierra
del sueño.

Soy quien contempla el acertijo en el gesto
de la luna

en el aljibe
y encarna en grito,
en fervorosa carcajada.
Soy quien pronuncia los versos secretos
que escribiste con tiza en un pliegue de la noche.

Soy mujer de un solo libro
que se reescribe infinito
en el canto de los días,
en nuestros cuerpos
tan terrenales que celestes.
Aleteo de ávidas aves
muy cerca.

Descifro y soplo.
Un beso infinito florece
en silencio de antorchas.

(Liliana Moreno Muñoz)

https://liberoamerica.com/2018/06/03/poemas-en-lengua-de-bruja-y-salto/





“(…) el amor y el odio existen en el alma, en la cual ni siquiera el demonio puede entrar”
(Malleus Maleficarum)


 

Némesis.
No todos los recuerdos escapan al silencio,
algunos están prestos para hablarte al oído.




Icónica y majestuosa obra maestra del rock.
“Stairway To Heaven” (Led Zeppelin)