Poesía

Tu voz es la espada que libera el silencio de mi alma.

sábado, 10 de julio de 2010


Soneto LXXXI. 
 
Ya eres mía. Reposa con tu sueño en mi sueño. 
Amor, dolor, trabajos, deben dormir ahora. 
Gira la noche sobre sus invisibles ruedas 
y junto a mí eres pura como el ámbar dormido. 

Ninguna más, amor, dormirá con mis sueños. 
Irás, iremos juntos por las aguas del tiempo. 
Ninguna viajará por la sombra conmigo, 
sólo tú, siempreviva, siempre sol, siempre luna. 

 Ya tus manos abrieron los puños delicados 
y dejaron caer suaves signos sin rumbo, 
tus ojos se cerraron como dos alas grises, 

mientras yo sigo el agua que llevas y me lleva: 
la noche, el mundo, el viento devanan su destino, 
y ya no soy sin ti sino sólo tu sueño. 

(Pablo Neruda) 





Fusión perfecta entre metales, orquesta sinfónica, y palabras de amor. Canción enmarcada en la melancolía que deja la ausencia de unos labios marcados en la piel. Amor; puedes huir de tu destino, pero no puedes cambiarlo. If you leave me now; Chicago. (1976)