Poesía

Tu voz es la espada que libera el silencio de mi alma.

domingo, 22 de diciembre de 2024

 

Quiero que seas tu.


Quiero que seas tú, esa luz, esa chispa que ilumine mi vida.

Quiero que seas tú, esa lluvia, esas gotas, que acaricien mi rostro.

Quiero que seas tú, ese pan, ese trigo que sacie mi hambre de ti.

Quiero que seas tú, solo tú mi sepulcro, porque muero de ti amor.

Quiero que seas tú, mi vida, mi luz, mi ser y mi eterno amor.

 

 

Épica canción, que bien podría describir nuestro secreto amor.

Meat Loaf, Blind As A Bat. (2006)





domingo, 3 de noviembre de 2024

 

Sueños, recuerdos y madurez.
 
A veces en tu silencio no sé qué decir, y me refugio en mis soliloquios, me imagino, sueño, vuelo. Alguna vez fui joven y estudiante, mi universo solían ser los libros de cuento, poesía y una que otra novela, por cierto, guardo con recelo aun mi libro favorito. Igual escribía frases vagas, llenas de amor y utopía, banales a los ojos mundanos; fui feliz, feliz cuando aún cabían mis sueños en mi viejo bolso de estudiante, y escribía de mi puño y letra, sueños que poseían vida propia, algunos se escaparon sigilosamente y jamás los puede atrapar, como todo en la vida. Viejos recuerdos vienen a mi memoria en este instante que escuche esta vieja canción, de esas que tienen vida propia, esas que sonaban en la radio de antaño después de la media noche, no puedo dejar de imaginar esos años, la nostalgia muchas veces aflora así porque si, al igual que las lágrimas. Un día lejano tú serás solo un recuerdo en mi vida, tuve la ilusión de una hija contigo, que mantuviera nuestros lazos por siempre, pero el destino es caprichoso. Hoy sé que la madurez deviene de aprender, no solo de los errores, sino de lo que deje ir cuando fue mío. Confieso que la vida ha sido generosa conmigo, incluso me permitió amarte.
 
 
 
 
El amor solo es un breve vórtice que mira al infinito, donde finalmente se perderá como mis besos en tu piel.
 
 
 
 
“Goodbye Horses” - Q Lazzarus. (1988) Fue escrita por William Garvey.
Según su autor, «la canción trata de la trascendencia sobre los que ven el mundo solo como terrenal y finito. Los caballos representan los cinco sentidos tratados en el “Bhagavad-gītā” y la capacidad de elevar la percepción sobre estas limitaciones físicas y ver más allá de esta limitada perspectiva terrenal»
https://es.wikipedia.org/wiki/Goodbye_Horses



miércoles, 9 de octubre de 2024

 John Winston Lennon

 “El cargo en realidad era subliminal: los Lennon emitían sus opiniones por doquier. El poder de convocatoria del músico resultaba letal respecto de temas de la coyuntura tan caros como la guerra de Vietnam y las libertades civiles.

(…)

John Lennon nunca ocultó sus reuniones, colaboración, conciertos masivos de apoyo y jugosas donaciones en metálico a movimientos radicales como el de los Panteras Negras, el Irish Republic Army (ira), y las actividades de Abbie Hoffman, Jerry Rubin, Bobby Seale, Angela Davis, Allen Ginsberg, John Sinclair y para colmo, la simpatía de Lennon por el candidato demócrata George McGovern. Era, en suma, un tipo muy peligroso ubicado en esa trinchera tan efectiva y de consecuencias hondas como es la contracultura.

 John Lennon es una figura central del poder inmenso, el verdadero poder diríamos, porque tiene de su lado el ejercicio de la libertad, la creación artística, el libre albedrío, en fin, el poder indestructible del individuo, que rebasa la muerte.

(…)

Había una vez un hombre que escribió estos versos:

 

dicen que estoy loco por lo que hago, me miran como a un ser raro de seguro porque no juego el mismo juego que todos juegan. Y me dicen perezoso porque hago de mi vida un tejido de sueños, y entonces me aplican consejos y altos designios que me conduzcan a la iluminación. Y lo que pasa es que solamente estoy sentado viendo cómo ruedan las ruedas. De veras que me gusta verlas cómo ruedan. Y para dejar de montar su alegre ronda, sé que lo único que tengo que hacer es dejar fluir. Y dejé fluir.”

 

Pablo Espinosa. “El hombre que miraba rodar las ruedas”.

En:

https://ru.ceiich.unam.mx/bitstream/123456789/3123/1/John_Lennon-e_Cap3_El_hombre_que_miraba.pdf

 


No solo es la nostalgia por la que te recuerdo, sino porque fui feliz esos días.



lunes, 16 de septiembre de 2024

 

La doble moral.

 “(…)  según Foucault (1984) se entiende por moral un conjunto de valores y reglas de acción que se proponen a los individuos y a los grupos por medio de aparatos prescriptivos diversos, como pueden ser la familia, instituciones educativas, iglesias, medios de comunicación, etc. Por moral también se entiende el comportamiento real de los individuos, en su relación con las reglas y valores que se les proponen; designamos así a la forma en que se someten más o menos o completamente a un principio de conducta, en que obedecen a una prohibición o mandato, o se resisten a ella, en que respetan o dejan de lado un conjunto de valores.”

Tania Miroslava Hernández Díaz "Sexualidad y Doble Moral" Tesis que para obtener el título de licenciada en psicología. UNAM. Facultad de Psicología, México, 2014, págs. 32 y 33.

 

“"¿Qué haremos, Señor? No podemos discernir entre el bien y el mal.

El abad (temiendo, como temían los demás, que se fingieran católicos por miedo de la muerte y volvieran a su infidelidad cuando él se fuera) contestó, según se afirma: "Matadlos, que Dios conoce a los Suyos". Fueron, pues, muertos en número incontable en esa ciudad.””

Crane Brinton. "Historia de la moral occidental”. Editorial Losada, Buenos Aires, pág. 235.

 


  Doble moral.

Ni yo he escapado a sus cantos sediciosos.

A veces la lengua es más larga que la vista

la palabra del Nazareno en ti no es más que blasfemia.

Que me puedes contar si conozco tu historia

arroparte con fortuna ajena es tu más íntima virtud.

 

 "Don't Expect Me to Be Your Friend", Lobo, del álbumOf a Simple Man 1972, después de la confesión, descubrí la razón de tu interés.




sábado, 20 de abril de 2024

 

Antonia.
 
La historia con Antonia finalmente se resume en una carta. Esa carta del adiós y el perdón.
 
Quinto semestre, sentados de frente en la clase de filosofía, las palabras pronto nos ataparon, y nuestras miradas cambiaron, una mañana por fin ese beso tan esperado, bendito amor. Dos veces por semana valía la pena la espera en el salón, me miraba y escribía hermosas palabras de amor en mi cuaderno de estudiante, y dibujaba ese tonto corazón atravesado por la flecha y nuestros nombres al centro.
 
En las noches me invadía su imagen y tejía historias mientras suavemente sonaba “Drive”. Hasta que una tarde sobre la almohada cayo el Walkman y entre nuestros murmullos se perdió la canción. Todo marcho bien como el gis a la pizarra.
 
Una fatídica mañana paso tan de prisa y me entrego una carta, jamás entendí porque tuvo que ser así, sin explicación, pero claramente leí en la carta la historia de desamor de sus padres, ¿Cómo podría haber semejanza en nuestra relación? Siempre supuse que esa es la razón de ese adiós. Ser joven te otorga el orgullo de no suplicar, el perdón a esa edad no existe.
 
Finalmente, un día la casualidad, el encuentro. Alguien cubrió mis ojos y escuche: ¿sabes quién soy? La sorpresa fue grande para ella, me acompañaba mi esposa. Pero insisto nuestra historia termino con esa maligna carta, y no puedo evitar recordarla al escuchar “Drive”. Supongo que así se ligan los amores con las canciones.
 
Fin.
 

 
Quisiera escribir, decir, gritar, quédate conmigo, porque en mi pesimismo solo siento como te alejas.
 
 
 Del álbum Heartbeat City, composición de Ric Ocasek, en la voz de Benjamín Orr: Drive, The Cars. 1984.