Poesía

Tu voz es la espada que libera el silencio de mi alma.

sábado, 29 de enero de 2011

Amor condusse noi ad una morte.

Amar es una angustia, una pregunta,
una suspensa y luminosa duda;
es un querer saber todo lo tuyo
y a la vez un temor de al fin saberlo.

Amar es reconstruir, cuando te alejas,
tus pasos, tus silencios, tus palabras,
y pretender seguir tu pensamiento
cuando a mi lado, al fin inmóvil, callas.

Amar es una cólera secreta,
una helada y diabólica soberbia.

Amar es no dormir cuando en mi lecho
sueñas entre mis brazos que te ciñen,
y odiar el sueño en que, bajo tu frente,
acaso en otros brazos te abandonas.

Amar es escuchar sobre tu pecho,
hasta colmar la oreja codiciosa,
el rumor de tu sangre y la marea
de tu respiración acompasada.

Amar es absorber tu joven savia
y juntar nuestras bocas en un cauce
hasta que de la brisa de tu aliento
se impregnen para siempre mis entrañas.

Amar es una envidia verde y muda,
una sutil y lúcida avaricia.

Amar es provocar el dulce instante
en que tu piel busca mi piel despierta;
saciar a un tiempo la avidez nocturna
y morir otra vez la misma muerte
provisional, desgarradora, oscura.

Amar es una sed, la de la llaga
que arde sin consumirse ni cerrarse,
y el hambre de una boca atormentada
que pide más y más y no se sacia.

Amar es una insólita lujuria
y una gula voraz, siempre desierta.

Pero amar es también cerrar los ojos,
dejar que el sueño invada nuestro cuerpo
como un río de olvido y de tinieblas,
y navegar sin rumbo, a la deriva:
porque amar es, al fin, una indolencia.

(Javier Villaurrutia)



Se que soy un hombre ordinario, que se rige por principios y valores, solo para dar congruencia a sus actos; y a mi juicio, el amor es el valor mas supremo, aquel que prescinde de mentira, ¿o no acaso la mentira prostituye el alma? Se que el amor a veces duele, sobre todo en la cruel despedida, pero en la vida hay que saber el momento apropiado para tomar decisiones, aun cuado el corazón se niegue a ello.
Bella letra que se asemeja a esa plegaria colmada de fe, que aun cree ciegamente en el amor verdadero; como aun lo creo yo. Del décimo álbum de estudio “The Boatman's Call”, del músico, actor y escritor, Nick Cave; “Into My arms". (1997)